Si alguna vez has visitado el centro histórico de Lima, seguramente te has maravillado con la imponente Catedral de Lima, que ocupa el lado este de la Plaza Mayor. Pero quizás no sabes que al costado de esta basílica se encuentra otra iglesia, más pequeña pero no menos importante, que guarda una rica historia y un valioso patrimonio artístico. Se trata de la Iglesia Parroquial del Sagrario, también conocida como San Juan.

¿Qué es el Sagrario?

El Sagrario es el lugar donde se guarda el Santísimo Sacramento, es decir, el pan consagrado que representa el cuerpo de Cristo. En muchas catedrales, el Sagrario se ubica en una capilla aparte, para darle mayor reverencia y respeto. En el caso de Lima, el Sagrario se construyó como una iglesia anexa a la Catedral, con su propia entrada y su propio altar.

¿Cuándo y cómo se construyó el Sagrario de Lima?

El Sagrario de Lima se construyó entre 1663 y 1678, por orden del rey Felipe IV y del arzobispo Pedro de Villagómez. El proyecto estuvo a cargo del arquitecto dominico fray Diego Maroto, maestro mayor de la fábrica de la Catedral. Para realizar esta obra, se demolió la antigua sala capitular del cabildo eclesiástico, que se había levantado en 1577 por el alarife Hernán Gutiérrez de Ulloa.

El estilo arquitectónico del Sagrario es barroco, con influencias renacentistas y platerescas. La fachada tiene tres puertas: la principal, que da a la Plaza Mayor; la lateral izquierda, que da al cementerio; y la lateral derecha, que da al Patio de los Naranjos. En la fachada principal se pueden apreciar las imágenes de San Juan Evangelista (patrono del templo), San Pedro y San Pablo (patronos de la Catedral) y el escudo real.

El interior del Sagrario tiene una sola nave cubierta por una bóveda de cañón corrido, que termina en una pequeña cúpula sobre pechinas. El altar mayor está dedicado al Santísimo Sacramento, y tiene un tabernáculo de plata repujada y un sagrario de madera tallada y dorada. Además, hay cinco retablos laterales dedicados a San Cristóbal, San Miguel, Nuestra Señora de las Aguas, Nuestra Señora del Carmen y el baptisterio.

¿Qué obras de arte se pueden admirar en el Sagrario?

El Sagrario alberga una valiosa colección de pinturas, esculturas, ornamentos y objetos litúrgicos. Entre las pinturas destacan las del maestro italiano Mateo Pérez de Alesio, quien realizó los lienzos del techo y las pechinas con escenas de la vida de San Juan Evangelista. También se pueden ver obras de los pintores limeños Francisco Bejarano, José Joaquín Bermejo y José del Pozo.

Entre las esculturas sobresalen las imágenes de bulto de San Juan Evangelista y San Juan Bautista, que flanquean el altar mayor. También hay una imagen policromada de Cristo Crucificado, atribuida al escultor Pedro de Noguera. Asimismo, hay varias tallas de madera dorada que representan a ángeles y santos.

Entre los ornamentos y objetos litúrgicos se encuentran piezas de plata labrada, como cálices, copones, vinajeras, incensarios y candelabros. También hay piezas de orfebrería peruana, como una custodia con piedras preciosas y un ostensorio con forma de sol. Además, hay textiles bordados con hilos de oro y plata, como casullas, capas pluviales y paños de altar.

¿Qué importancia histórica tiene el Sagrario?

El Sagrario no solo es un lugar de culto religioso, sino también un testimonio de la historia peruana. En este templo se guardan los archivos parroquiales más antiguos de Lima, que contienen las partidas de bautizo, matrimonio y defunción de muchos personajes ilustres, como el conquistador Francisco Pizarro, el virrey Francisco de Toledo, el libertador José de San Martín y el héroe Miguel Grau.

Además, el Sagrario fue escenario de varios acontecimientos históricos, como la proclamación de la independencia del Perú por San Martín en 1821, la jura de la Constitución de 1823 por Simón Bolívar y la coronación del inca Atahualpa por el obispo Vicente de Valverde en 1533.

¿Cómo visitar el Sagrario?

El Sagrario está abierto al público de lunes a sábado, de 9:00 a.m. a 5:00 p.m., y los domingos, de 1:00 p.m. a 5:00 p.m. La entrada es gratuita, pero se recomienda dejar una donación voluntaria para el mantenimiento del templo. Se puede acceder al Sagrario por la puerta principal que da a la Plaza Mayor o por la puerta lateral que da al Patio de los Naranjos.

El Sagrario ofrece visitas guiadas para grupos previa reserva. También se puede solicitar información en la sacristía o en la oficina parroquial. El Sagrario es un lugar sagrado, por lo que se pide respetar el silencio, la limpieza y el decoro. No se permite tomar fotografías con flash ni grabar videos sin autorización.

El Sagrario es una joya arquitectónica y artística que vale la pena conocer y apreciar. Es una muestra del arte colonial peruano y de la fe católica de los limeños. Es también un espacio de memoria y de identidad, que nos conecta con nuestro pasado y con nuestra cultura. Te invitamos a visitar el Sagrario y a descubrir sus secretos y su belleza.